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viernes, 8 de enero de 2010

EL COMIENZO

Su primera experiencia sexual fue sobre los nueve años, una mañana como de costumbre se dirigió al baño a hacer pipi, a la hora de secarse, toco algo en su cuerpo que la hizo estremecer, al principio se asusto ya que nunca antes le había sucedido nada parecido.
Pero su curiosidad la llevo a repetir ese movimiento nuevamente, su culito daba saltitos sobre la tapa de la vasija, sus dedos se guiaban por instinto y con ganas de seguir sintiendo esa sensación tan extraña y tan agradable a la vez.
¿Porque no pregunto, qué era eso tan agradable que le había pasado? .Bueno pues teniendo en cuenta que estamos hablando del año 1981, que mucha música de los 80 y mucha historia, pero aun el sexo era tabú. Estábamos en la época de los ROMBOS, un ROMBO y tus padres ya te empujaban fuera del cuarto de la tele, ¿y porque?, porque se veía un hombro desnudo, una espalda descubierta o una minifalda, jajajajajaja.
Una amiga mía me dice siempre que no hay ROMBOS suficientes para ponerle a mi blog ya que se quedaría corta, yo me rio ya que son más las cosas que me suelo callar que las que cuento, pero….. Sigamos con la historia.
Estaba claro que preguntando en casa lo único que se iba a llevar por respuesta era una colleja, por lo que esperaba a llegar al cole y contárselo a sus amigas. Había que ver la ignorancia sexual que había en los menores.
Al contárselo a sus amigas, estas se escandalizaron casi que la llamaron mentirosa ya que ellas también iban al baño, se secaban después de hacer pipi y nunca les había pasado eso, una dijo que seguro que sería un calambre, pero la chica lo descarto ya que había tenido calambres en los pies y nunca había sentido una sensación tan agradable.
Estaba claro que sus amigas sabían del tema aun menos que ella, por lo que decidió no contárselo a nadie más. Sus idas y venidas al baño eran cada vez más frecuentes, intentaba tocarse cuando tenía ganas de hacer pipi y una vez sentía como algo se le rompía por dentro, en ese preciso momento hacia pipi y esa sensación era aun mucho más intensa y agradable. Era tanto lo que sentía y que ya no podía evitar hacerlo hasta viendo la tele, se tapaba con una manta y se tocaba bajo la misma, sin importarle no estar sola.
Como cada año por vacaciones, iba a visitar a su familia, pero ese año todo fue diferente, ya que ella seguía en su mundo de sensaciones y de experimentar. Compartía cuarto con su primo, una noche esta se estaba tocando y sin darse cuenta hacia ruidos con la boca, su primo encendió la luz y le pregunto, ¿ qué te pasa, estas mala?, ella lo miro a los ojos y le dijo que no lo sabía. Él le dijo que si llamaba a su madre, ella le dijo que no, que no era nada, que se acostara y apagara la luz.
Ella lo volvió a hacer nuevamente, pero esta vez mordiéndose su labio inferior, pero aun así se oían sus gemidos, su primo volvió a encender la luz y la pillo con la mano por dentro de las bragas.
¿Qué haces pregunto?, ella sin tapujos le dijo que se acariciaba, ¿el qué?, pregunto el, ella sonrió a la vez que se sonrojo y le dijo que se acariciaba sus partes.
Su primo se sentó en la cama y respiro muy profundamente.
Ella, le dijo que si se encontraba bien.
El, con un nudo en la garganta le dijo que sí, que en verdad ahora si ya que a él le pasaba lo mismo y pensaba que estaba enfermo.
Los dos se miraron y empezaron a reír, ella y curiosidad la llevaron a hacer preguntas, ¿Qué te tocas y como lo haces?.
Su primo, cortado se lo explico, se la sujetaba con la mano y se la acariciaba de adelante hacia atrás.
El no le pregunto nada, pero esta se lo conto igualmente.
Después de levantarse, lavarse y desayunar, prepararon todo para pasar el día en la playa.
Mientras los adultos ponían las sombrillas y preparaban todos para el asadero, los críos jugábamos en el agua, unos jugaban con cubos otros con pelotas, pero mi primo y yo, jugábamos a algo nuevo, diferente, le propuso a su primo que le enseñara su sexo y podría ver el de ella, el no se resistió, antes de ella darse cuenta ya lo tenía por fuera del bañador, que cosa más pequeña y arrugada, la verdad es que le dio un poco de repelús.
Él le decía que ahora le tocaba a ella, claro que esta se hizo el bañador hacia un lado y el no veía nada, déjame verlo bien, le decía él, ella le decía es esto no hay más. El se quedo decepcionado, en verdad no sabía que era aquello, solo había visto la continuidad de la barriga, ósea otro trozo de carne mas.
El día fue intenso, agobiante por el calor y largo, muy largo ya que no podía tocarse, parecía como si todos la mirasen.
Después de almorzar , todos volvieron al agua, su primo empezó a jugar con ella, a hacerle cosquillas y en una de estas sin querer le cogió su minúsculo pecho, ella sintió una necesidad incontrolable de tocarse, y así lo empezó a hacer, su primo le quito la mano del pecho y esta se la volvió a poner , el se pego a su espalda y esta noto algo duro detrás, estiro la mano y toco a ver que era, al darse cuenta que era el sexo de su primo, quito su mano y dejo de tocarse, se lanzo al agua y comenzó a nadar.
Estaba confundida, sabía que lo que hacía no estaba bien, solo pensaba que si sus padres se enteraban la matarían.